martes, 13 de enero de 2009

33. La cocina es algo importante

Es el espacio interior más intensivamente utilizado. En muy poco espacio debe haber conducciones de agua, gas y electricidad (12 V y 220 V)y extracción de aire. Un volumen reducido debe dar cabida a un arcón congelador, una nevera, un microondas, una cocina y un horno. Además está el fregadero, la despensa, el espacio para las sartenes, el escurridor, la basura...
Hemos tenido que replantear lo que ya estaba construido para dar cabida a los modelos de electrodomésticos por los que hemos optado: el microondas actúa como panificadora, la cocina es la más grande del mercado náutico y la nevera también. El arcón irá debajo del suelo, pegado al casco, debidamente aislado.La encimera es de teca mazica para hacer más cómodo el trabajo. A la bolsa de la basura se accederá desde una tapa encastrada en la misma encimera. También habrá una tapa para el fregadero, con una bisagra que permita trabajar sobre esa parte de la encimera cuando el fregadero no esté en uso.Por otra parte, la puerta de la amplia despensa, es también de gran tamaño y, cuando esté abierta, cerrará el cubículo de la cocina, habilitando una serie de estanterías de elementos prácticos de la cocina (especias, cuchillos y otros utensilios, etc), dejándolos muy accesibles, quedando ocultas con un solo movimiento, al cerrar la puerta.
En fin, ahí tenemos a Charles, echándole un ojo al rompecabezas de la cocina.

sábado, 3 de enero de 2009

32. Elegir el motor


Ha llegado la hora. Tenemos que decidir que motor instalamos. De qué marca y de qué potencia. Los planos originales del Caroff preveían un viejo rockero como el que monta el Adaxe Catro: un Perkins 4108. He leido por aquí que su tecnología es de los Picapiedra, pero lo cierto es que es muy fiable, se encuentran repuestos, y se le puede meter mano sin que la tecnología electrónica te convierta en un inútil. El inconveniente es que es muy pesado, puro ferro, que dice Jobó, y que no llega a los 50 CV, lo que puede ser muy justo para el Outro Adaxe.
Pero ¿cuantos caballos necesitamos?. Los fabricantes tienen unos programillas con los que, introduciéndo unos datos básicos (desplazamiento, eslora en flotación y tipo de casco) te da la potencia requerida. Hemos encontrado en una web americana (http://boatdiesel.com/) en la que, si te haces miembro (algo así como 10 € al año) puedes acceder a un montón de información independiente, de mecánicos profesionales, en las que discuten sobre averías y causas, marcas y fallos, etc, y en la que, además, puedes acceder a un par de programas: uno para calcular la potencia requerida y otro para calcular las características de la hélice más apropiada para un determinado marco y motor.
Ahí metimos los datos del Outro Adaxe y nos dió, entre otros detalles, los siguientes resultados:
RESULTS DISPLACEMENT HULL
Hull Speed: 8.8 kts.
Power Required: 87.5 shp.
Speed To Achieve a Cruising Speed of 8 kts
Required Power At Prop: 66.8 SAE hp 49.8 kW
At Flywheel: 68.9 SAE hp 51.4 kW
Así que, teóricamernte con un motor de 87,5 CV obtendríamos la máxima velocidad del barco. También es cierto que para una velocidad de crucero alta, pusimos ocho nudos, te bastarían con 67 CV. Vas y te quedas tan contento, pero después empiezas a darle vueltas a la oportunidad de tener potencia de reserva para cuando vienen mal dadas, a lo bueno que es navegar sin tener que revolucionar demasiado el motor, a los consumos a altas revoluciones, etc. Y concluyes: mejor darle un margen, vamos a pensar en al menos 100 CV.
El siguiente paso es elegir la marca y modelo. Descartando la excesiva electrónica te encuentras con modelos descatalogados, como el Volvo Penta MD 31, de cuatro cilindros que, con turbo pero sin intercooler, ya le sacan 100 CV. Si lleva intercooler llega a 130 CV. Es pequeño, no lleva electrónica y... no hay quien lo encuentre. Hemos hablado con la Volvo y esperaremos hasta final de enero por si aparece alguno. Ellos lo repararían y lo garantizarían... pero es improbable.
Si no aparece no nos queda más que tragar por un poquito de electrónica y, después de leer y escuchar, nos quedaríamos con el D3 110, de Volvo. Es un cinco cilindros muy ligerito, pero ya no es lo mismo que los volvos de toda la vida. Este es una adaptación a la náutica un poco comprometida, por los materiales (atentos a la corrosión) y por la electrónica. Nos gustaría no tener que depender de ella, te puede dejar vendido, pero los de la marca dicen que no, que llevan ya cinco años instalándolos, que tal y tal. La otra opción es el Yanmar

jueves, 1 de enero de 2009

31. Los baños y las aguas

Los dos baños (proa y popa) van a llevar una ducha con mampara, algo que un barco no es muy común. Llevan lavabo y wc en porcelana y grifería "doméstica" con agua caliente y fría. Todo forrado en madera, buen sistema de aireación, todo muy confortable.
La idea es hacer un único agujero en el casco para la expulsión opcional del WC (en puerto deben almacenarse esas aguas negras para después vaciarlas con una bombas de succión que, hoy por hoy, reinan por su ausencia en las marinas...).
Las aguas grises (ducha y lavabo) van a un sistema único desde el que se bombea al mar. El objetivo es hacer el mínimo de agujeros al casco, así, solo habrá dos orificios de admisión de agua salada. Ya estaban hechos en el casco, en el compartimento del motor, fáciles de revisar y mantener. Uno lo dedicaremos a los motores (principal y auxiliar para el generador) y otro al resto de las necesidades de abordo: baños, potabilizadora y grifo de agua salada sólo en la cocina. Todo ello concentrado en un sistema de grifos que permitirá aislar un determinado servicio si tenemos una avería.
Además de estos dos orificios tendremos los dos de expulsión de aguas negras, una expulsión de aguas grises, el escape húmedo y, por supuesto los del jet trhuster de proa. No abrá corredera.